Reproducimos tal e como foi redactada unha noticia deste Concello alicantino. Pouco máis podemos decir. Estes Concellos progres son capaces de calqueira cousa. Logo nos botan as culpas cando perden....
La salud a cambio de su puesto de trabajo.
Un despedido de la empresa de la limpieza viaria en Pilar de la Horadada seguirá en huelga de hambre hasta que le readmitan. Con tres hijos perdió su trabajo por una vacuna. Desde el 2 de abril trata de recuperar su empleo en ayunas y viviendo en una tienda de campaña porque también le echaron de la iglesia.Lleva once días a base de bebida isotónica. Ha renunciado incluso a zumos y a leche y ya ha perdido ocho kilos. José Antonio Gracia Figueroa, ex empleado de STV Gestión (concesionaria del servicio de limpieza de Pilar de la Horadada) y miembro activo de la sección sindical de CNT (Confederación Nacional del Trabajo) se encuentra 'un poco flojo, sin fuerzas', pero va a seguir en su huelga de hambre 'hasta que el cuerpo aguante'. El médico le visitó el sábado y le aconsejó que abandone, pero su objetivo es que le vuelvan a contratar en la empresa que le ha despedido, tras 14 años de trabajo, por reaccionar de forma 'airada' ante una sanción de diez días de empleo y sueldo por vacunarse en el Centro de Salud y no en los servicios de la empresa.Las cámaras de seguridad registran, dice, su reacción: 'sólo pregunté en tono elevado ¿es que me vais a despedir?'. Su abogado cree fácil lograr el despido improcedente, pero José Antonio, de 35 años, quiere que sea nulo porque con toda su vida laboral dedicada al mismo empleo no ve claro otro futuro, y más sabiendo que, con tres hijos (doce, cuatro y un año) su mujer tampoco trabaja. 'Estoy viviendo literalmente de limosna, de lo que me prestan mis padres y amigos'. Sin firmar el finiquito ni siquiera puede ir al paro.Lo que peor lleva son la noches. Pasa miedo, 'porque estas indefenso y oyes a gente pasar, gente que se para y no sabes qué hacen'. Duerme en una tienda de campaña frente a la iglesia pues el cura se negó a acogerle dentro, según asegura, y cinco patrullas de Guardia Civil y Policía le obligaron a abandonar el templo. Salió por su propio pie para evitar denuncias por desacato. Desde entonces sufre el frío y la lluvia. Las procesiones han pasado junto a él y a pocos metros ha estado el alcalde, Ignacio Ramos, pero no ha contestado a las cuatro cartas en las que le pide una reunión (STV Gestión está contratada por el Ayuntamiento).Estos días los pasa con otros compañeros de trabajo y le consta que muchos de los 40 empleados de la plantilla le apoyan, pero cree que tienen miedo por presiones de la empresa. CNT atribuye el despido, de hecho, a su participación en el sindicato y recuerda otros casos, como la sanción de un mes de empleo y sueldo a otro compañero por faltar un día al trabajo para ingresar a su hijo. 'Tengo ganas de estar en mi casa con mi mujer y mi familia, pero me mueve más la injusticia', sostiene Gracia.
Un despedido de la empresa de la limpieza viaria en Pilar de la Horadada seguirá en huelga de hambre hasta que le readmitan. Con tres hijos perdió su trabajo por una vacuna. Desde el 2 de abril trata de recuperar su empleo en ayunas y viviendo en una tienda de campaña porque también le echaron de la iglesia.Lleva once días a base de bebida isotónica. Ha renunciado incluso a zumos y a leche y ya ha perdido ocho kilos. José Antonio Gracia Figueroa, ex empleado de STV Gestión (concesionaria del servicio de limpieza de Pilar de la Horadada) y miembro activo de la sección sindical de CNT (Confederación Nacional del Trabajo) se encuentra 'un poco flojo, sin fuerzas', pero va a seguir en su huelga de hambre 'hasta que el cuerpo aguante'. El médico le visitó el sábado y le aconsejó que abandone, pero su objetivo es que le vuelvan a contratar en la empresa que le ha despedido, tras 14 años de trabajo, por reaccionar de forma 'airada' ante una sanción de diez días de empleo y sueldo por vacunarse en el Centro de Salud y no en los servicios de la empresa.Las cámaras de seguridad registran, dice, su reacción: 'sólo pregunté en tono elevado ¿es que me vais a despedir?'. Su abogado cree fácil lograr el despido improcedente, pero José Antonio, de 35 años, quiere que sea nulo porque con toda su vida laboral dedicada al mismo empleo no ve claro otro futuro, y más sabiendo que, con tres hijos (doce, cuatro y un año) su mujer tampoco trabaja. 'Estoy viviendo literalmente de limosna, de lo que me prestan mis padres y amigos'. Sin firmar el finiquito ni siquiera puede ir al paro.Lo que peor lleva son la noches. Pasa miedo, 'porque estas indefenso y oyes a gente pasar, gente que se para y no sabes qué hacen'. Duerme en una tienda de campaña frente a la iglesia pues el cura se negó a acogerle dentro, según asegura, y cinco patrullas de Guardia Civil y Policía le obligaron a abandonar el templo. Salió por su propio pie para evitar denuncias por desacato. Desde entonces sufre el frío y la lluvia. Las procesiones han pasado junto a él y a pocos metros ha estado el alcalde, Ignacio Ramos, pero no ha contestado a las cuatro cartas en las que le pide una reunión (STV Gestión está contratada por el Ayuntamiento).Estos días los pasa con otros compañeros de trabajo y le consta que muchos de los 40 empleados de la plantilla le apoyan, pero cree que tienen miedo por presiones de la empresa. CNT atribuye el despido, de hecho, a su participación en el sindicato y recuerda otros casos, como la sanción de un mes de empleo y sueldo a otro compañero por faltar un día al trabajo para ingresar a su hijo. 'Tengo ganas de estar en mi casa con mi mujer y mi familia, pero me mueve más la injusticia', sostiene Gracia.
Fuente: TVHoradada
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